Los protectores de estómago, como el Omeprazol, son prescritos de forma rápida y sin una investigación médica suficiente de la enfermedad del paciente, cuando solamente están indicados específicamente para úlceras y enfermedades de reflujo. Según una nueva investigación, el abuso de este tipo de medicamentos provoca una deficiencia de la vitamina B12 que podría derivar en demencia, daño neurológico, anemia y otras complicaciones.
Un estudio llevado a cabo por el Kaiser Permanente Institute (EE.UU.) ha revelado que tomar durante dos o más años inhibidores de la bomba de protones (IBP) y antagonistas de los receptores de histamina 2 (ARH2), dos tipos de medicamentos contra el ardor gástrico, está relacionado con un diagnóstico posterior de deficiencia de vitamina B12. Esto se debe a que la reducción del ácido gástrico que genera estos medicamentos impide la normal asimilación de esta vitamina, que ingerimos sobre todo a través de la carne animal.
Los inhibidores de la bomba de protones, como el omeprazol o exomeprazol, son fármacos que evitan la formación de ácido en el estómago al inhibir la función de la estructura encargada de introducir los iones ácidos en el estómago , necesarios para la digestión de los alimentos. Sus efectos duran 24 horas aproximadamente, por lo que sería suficiente con tomar 1 al día.
Los especialistas aseguran que existen formas alternativas de combatir la secreción ácida que no pasan por una medicación continuada, sino que se limitan a la adopción de una postura determinada durante el proceso de digestión y a un cambio en la dieta.
Riesgos y recomendaciones
El artículo publicado en la revista Journal of the American Medical Association, constata que las personas que tomaron diariamente un medicamento del grupo de omeprazol durante dos o más años tenían un 65% más de probabilidades de tener niveles bajos de vitamina B12 que quienes no habían ingerido estos fármacos durante un periodo tan prolongado. En cuanto a las dosis más peligrosas, se comprobó que tomar diariamente 1,5 comprimidos se asoció con un riesgo un 95% superior a esta deficiencia en comparación a una ingesta diaria inferior a 0,7 píldoras.
Por otro lado es recomendable hacer mediciones periódicas de la vitamina B12 en aquellas personas que estén en tratamiento crónico con estos medicamentos. Un simple análisis de sangre permite determinar los niveles. Y, si hay déficit, se puede administrar esta vitamina una vez al mes por vía intramuscular.
Por último insistir en que no hay que confundir el peligro del Omeprazol y fármacos similares con
otros denominados genéricamente antiácidos, y que sirven para eliminar puntualmente la acidez tras una ingesta copiosa. El más popular de estos es el bicarbonato sódico que por suerte se dejó de utilizar, ya que es un producto que neutraliza la secreción ácida pero cuando pasa su efecto puede producir un efecto rebote, es decir, que genera más secreción ácida.
Tomar Omeprazol aumenta el riesgo de enfermedad renal crónica en un 28% y el riesgo de padecer una insuficiencia renal en un 96%. Son varios estudios los que confirman estos datos. Omeprazol y daño renal, omeprazol y pólipos en estomago, omeprazol y fracturas de cadera, omeprazol y infarto cardiaco son algunas de las relaciones encontradas de uno de los fármacos mas consumidos en España. Esto hace ver lo importante que es que personas mayores eviten la polimedicación. Cada medico receta algún medicamento al paciente mayor, pero quien se encarga de quitar los que ya no hagan falta?
