En los últimos años se ha generado un amplio debate sobre las grasas trans y la verdadera solución a los problemas de obesidad que padecen cada vez más personas .En las etiquetas aparece como aceite hidrogenado o como parcialmente hidrogenado. El proceso consiste en agregar un átomo de hidrógeno o la transformación de un isómero para hacer la grasa más estable, que pueda almacenarse por más tiempo y permanecer sólida a temperatura ambiente.
La Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos advierte que no tienen ningún valor nutricional y que aumentan el colesterol en la sangre. En una dieta de 2 mil calorías, más de 2 gramos de grasas trans bastan para aumentar seriamente el riesgo de sufrir enfermedades cardíacas.
Lo que muchos se preguntan es qué alimentos son los más dañinos para el organismo. El portal BBC Mundo elaboró un listado con algunos de los más importantes:
1. Galletas, pasteles congelados y otros alimentos horneados: Estos productos generalmente contienen grasas trans que los hacen más ligeros y menos “aceitosos”, pero son en definitiva más nocivos. Lo recomendable sería preparar este tipo de alimentos en casa (y lo ideal es evitar aquellos que contienen azúcar o sodio en exceso).
2. Palomitas para microondas: En estos productos se agregan grasas trans para su conservación. Por eso, es mucho mejor preparar las palomitas de la manera tradicional, en la olla y, preferentemente, con aceites más sanos, como el de oliva virgen.
3. Pizzas y productos congelados: Al igual que en el caso de las palomitas para microondas, otros alimentos congelados contienen grasas trans para prolongar su vida útil. Esa es la razón por la que es definitivamente mejor comprar productos frescos, aunque duren menos. También es cierto que se debe leer bien las etiquetas antes de elegir, pues algunos snacks o preparados aclaran que no emplean grasas trans en su elaboración.
4. Margarina o manteca vegetal: Para solidificar el aceite vegetal líquido se debe procesar el
producto y agregarle muchos químicos, por ello es mejor usar la manteca antes que la margarina. Aunque los nutricionistas explican que los productos de origen animal no son los ideales, en el caso específico de la manteca es mejor metabolizada por el cuerpo que la margarina.
5. Leche para el café: Si se puede usar leche fresca y descremada, mejor.
6. Masas preparadas refrigeradas: En estos productos se usan grasas trans para una mejor conservación en el frío y para que las masas conserven su suavidad. Aunque hay otros ingredientes naturales como el aceite de canola que podrían cumplir esta misma función, su costo es mayor, lo cual resultaría contraproducente para los fabricantes.
7. Baños para repostería preparados: Contienen grasas trans que ayudan a mantener su consitencia. Si se es de los aficionados a la repostería, mejor preparar los baños de la forma clásica, si es un glacé se puede hacer con azúcar, manteca, leche o vainilla natural.
Resumiendo
Para evitar las grasas «trans» deberemos tener en cuenta que se encuentran de forma habitual en snacks y aperitivos salados como palomitas de maíz o patatas fritas, alimentos precocinados, galletas, margarinas y bollería industrial.
Es mirando la etiqueta, en la lista de ingredientes cómo lo podremos saber, porque aquí es donde los fabricantes deben indicar si el producto tiene grasas hidrogenadas o parcialmente hidrogenadas.
