En el tratamiento del dolor frecuentemente hay que recurrir a medicación. Esta medicación en la mayoría de los casos es medicación analgésica que no tiene efectos que produzcan dependencia. A nivel social, ahora mismo en Estados Unidos, sin embargo, está teniendo lugar una verdadera epidemia contra la adicción debida al abuso del uso de medicación analgésica.
En muchos casos de dolor crónico, los médicos americanos prescribían Oxicodona, que es un medicamento opioide que se utiliza en el tratamiento del dolor crónico. Dentro de la clasificación del tratamiento de dolor, esta indicado para el dolor moderado a severo. Muchos pacientes recibían este medicamento para el tratamiento de su dolor por prescripción médica. Pero como todos los medicamentos opioide, puede crear adicción. Los médicos en un cierto momento recomendaban al paciente dejar de tomar la oxicodona para el tratamiento de su dolor, por lo que no les daban más prescripciones. Los pacientes se habían vuelto dependientes por lo que al dejar de tomar la medicación inmediatamente presentaban síntomas de deshabituación. Al no poder conseguir el medicamento por receta, se lo procuraban en el mercado negro por lo que a largo plazo resulta bastante costoso.
La opción mucho más barata es tomar heroína. Esto tiene el mismo efecto que la Oxicodona y es fácil de conseguir en el mercado negro y a un precio mucho menor que el mismo medicamento.
Esto ha llevado a un marcado aumento de las personas dependientes de heroína y está creando varios estragos a nivel de muchas pequeñas comunidades americanas en las que los niños crecen sin los padres porque estos son drogodependientes o están encarcelados o en clínicas de deshabituación.
La Oxicodona es un fármaco para el tratamiento del dolor moderado a severo por vía oral. En muchos casos se considera como el opioide oral de primera elección para el tratamiento del dolor intenso no controlado con morfina o en caso de intolerancia a esta. El médico que le prescribe tiene que ser consciente de que se está recetando un medicamento con efecto adictivo por lo que debería responsabilizarse de conseguir que el paciente consiga también dejarla.
La Oxicodona es un medicamento que se puede complicar si no se trata con sumo cuidado. Hay que tener precaución en manos de quién intentas curar tus patologías, y debes tener en cuenta su experiencia y formación, como bien puedes observar el trabajo realizado por el Doctor Marco Franzreb.