• 26 FEB 13

    Un reciente estudio, en la población danesa, ha vuelto a confirmar la relación entre la toma de antibióticos y la obesidad. Muchos estudios en los últimos años han podido evidenciar esta relación. En el caso de este estudio de principios de 2011 se estudiaron cerca de 180 personas, de las cuales una parte tenían un índice de masa corporal normal y 122 presentaban sobrepeso. La mayoría de las personas incluidas en el estudio, presentaban una flora intestinal normal con 600.000 genes bacterianos distintos. Un tercio de las personas con sobrepeso, presentaba una flora intestinal con solo 360.000 genes distintos. Esto representa, un grave desequilibrio en la flora intestinal, lo cual se relaciona con el aumento de peso en estas personas.

    Este desequilibrio es frecuentemente consecuencia de la toma de antibióticos la cual siempre lleva a un “exterminio” de parte de la flora intestinal. Consecuencia de esto es a veces un desequilibrio con aumento y disminución de ciertas cepas bacterianas y/o un empobrecimiento en la diversidad de la flora intestinal. La consecuencia metabólica es, al haber una presencia aumentada de bacterias que utilizan el alimento de manera exagerada, un aumento del aporte de energía al cuerpo humano. En los desequilibrios intestinales estas bacterias se aprovechan de la falta de otras bacterias para aumentar su población. Al aumentar la población de estas bacterias que producen un exceso de aporte de calorías a la persona, la persona afectada aumenta de peso. Pero se dan muchos otros efectos de este desequilibrio ya que entre otras cosas el 70% de nuestro sistema inmune depende de una adecuada flora intestinal. En niños muchas veces las anginas crónicas son solucionadas mejorando la flora intestinal. Todas las personas con antecedentes de cáncer intestinal, flatulencia, problemas en las deposiciones, alergias y problemas de la piel deberían hacerse un estudio de su flora intestinal. Desgraciadamente aun no es posible conseguir el examen necesario en España por lo que a día de hoy aún tenemos que mandar las muestras a Alemania para su análisis. Este análisis de las heces nos dará un informe detallado de su composición. De esta manera se puede luego aportar exactamente aquellas bacterias que precisa el intestino para que su equilibrio bacteriano sea restablecido.

    Y cuidado con los yogures pro bióticos. No abuse de ellos. Si toma un producto con un solo tipo de bacteria en él durante un largo período de tiempo provocará problemas intestinales sin que se dé cuenta en el momento pero a largo plazo el intestino se “vengará”.

    28.05.11

    Un nuevo estudio, volvió a confirmar la relación entre la flora intestinal y el sobrepeso en un estudio realizado con 250 personas. En este estudio se distingue entre 3 tipos de flora intestinal. Son múltiples los estudios que distinguen entre distintos tipos de flora intestinal. Revistas tan prestigiosas como Nature publican estudios a este respecto. Es posible que en el futuro aparte del grupo sanguíneo demos nuestro enterotipo. Un proyecto multinacional llamado MetaHIT ha conseguido identificar todos los genes de más de tres millones de bacterias. Son alrededor de 100 billones de bacterias, las que colonizan nuestro intestino, pero según el tipo de bacteria más frecuente en el intestino se distingue entre tres tipos: 

    En el tipo uno: la flora intestinal dominante son bacterias tipo Bacteroides. Estas se caracterizan por digerir muy bien azúcar y proteínas y producir distintas vitaminas. 

    El tipo dos: en este tipo se encuentran sobretodo bacterias tipo Prevotella. Estas obtienen energía sobretodo de complejos glucoproteicos y utilizan vitamina D1 y acido fólico. 

    El tipo tres: En este caso dominan las bacterias Ruminococco. Estas digieren sobretodo proteínas. 

    Los tres enterotipos llevan el nombre de la bacteria que predomina en cada uno de ellos.

    El tipo uno es Bacteroides, el tipo dos, Prevotella y el tres, Ruminococo.  

    Sorprendentemente los hallazgos en participantes procedentes de España no eran distintos a los de otros países. Se pensaba que podrían diferir por una alimentación y un estilo de vida diferentes, pero no ha sido así. En este estudio se relaciona los distintos tipos de flora intestinal con tendencia a ciertas enfermedades como por ejemplo cáncer intestinal, enfermedades intestinales inflamatorias como el Crohn, el síndrome metabólico, la diabetes tipo 2 y la obesidad. En el caso de paciente con sobrepeso, se puede conseguir bajar de peso si se adecua la alimentación a la flora intestinal presente en este paciente. Se ha intentado establecer una relación entre un mayor índice de masa corporal (IMC) con un determinado enterotipo, pero no se ha identificado. Aún no se sabe por que existen diferentes tipos de flora intestinal, pero esta clara su relación con el sistema inmunitario.

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