En una jarra grande de boca ancha pondremos:
- 3 cucharadas de gránulos de kéfir (Para que sea más cómodo manejar los gránulos, podemos colocarlos en una gasa y hacer una muñequilla, amarrándolo con un hilo, así no tendremos que colarlos y para limpiarlos sólo habrá que ponerlos debajo del chorro suave del grifo).
- 50 grs. de azúcar moreno. O también se puede sustituir por miel de abeja, miel negra o melaza de caña. Para que lo puedan tomar los diabéticos, en vez de los anteriores ingredientes, se puede poner fructosa (azúcar de frutas) o edulcorante de Stevia rebaudiana (planta que hace descender los niveles de azúcar y tiene gran poder edulcorante).
- 1 ó 2 higos secos u otra fruta como dátiles o albaricoques secos.
- 1/2 limón pequeño bien lavado.
- Llenar con 1 litro de agua y remover. Después de 24 horas remover de nuevo.
Tiempo de fermentación:
- Se deja fermentar como mínimo 2 días y como máximo 3.
- Atención: El ácido carbónico aumenta cada día, por lo que no debe taparse el recipiente herméticamente, ya que podría estallar.
- Colar el líquido que estará listo para su consumo.
- Lavar bien los gránulos de Kéfir bajo el agua del grifo, cambiar de recipiente y proceder como al principio.
- Los gránulos de Kéfir se reproducen bastante, por lo que se aconseja dar los que sobran a un amigo, o llevarlos a alguna herboristería u otro centro que se dedique a hacer de intermediario, ya que son muy difíciles de conseguir.
-
La bebida de Kéfir sabe mejor fría, por lo que es muy recomendable en los calurosos días de verano.